ROB脫TICA / NEUROCIENCIA

Un brazo bi贸nico permite hacer vida normal a un amputado

( 1 Voto )
a / A
Larger Font Smaller Font

El implantado lleva 18 meses con una pr贸tesis que le ha devuelto el sentido del tacto

Una mano bi贸nica devuelve la capacidad de sentir a un hombre

20141009-1
El camionero Magnus hace todo tipo de actividades con su pr贸tesis. /聽ORTIZ-CATALAN ET AL., SCI. TRANS. MED., 2014

(CIENCIA, 08/10/2014) Magnus, un camionero sueco, perdi贸 el brazo hasta la altura del codo hace una d茅cada. Pero desde hace 18 meses conduce su cami贸n entre la frontera entre Suecia y Finlandia como si nada. Una pr贸tesis implantada en el hueso le ha devuelto la capacidad de coger cualquier cosa o tocar a alguien.

En los 煤ltimos a帽os el desarrollo de la mecanotr贸nica (un neologismo para referirse a la confluencia de mec谩nica, electr贸nica e inform谩tica) ha permitido el desarrollo de pr贸tesis muy sofisticadas. De forma paralela, los avances en neurociencia han desentra帽ado todos los pasos que hay entre pensar mover un brazo y que este se mueva. Para los amputados, faltaba unir ambos extremos.


V铆deo ABC.ES

Es lo que ha hecho un equipo de las universidades suecas de Gotemburgo y Chalmers liderado por el mexicano聽Max Ortiz Catal谩n. Dise帽aron un antebrazo bi贸nico que implantaron en el brazo, por encima del codo de Magnus, un camionero que perdi贸 el suyo hace 10 a帽os en un accidente. Y es un implante literal: por medio de un tornillo de titanio conectaron la pr贸tesis al hueso. En este sentido, se diferencia poco de un implante dental.

"Pero por dentro del tornillo van una serie de conectores que transportan las se帽ales el茅ctricas hacia y desde unos electrodos insertados en sus nervios y m煤sculos", dice Ortiz Catal谩n. Esta es una de las principales aportaciones de su trabajo, cuyos resultados han sido publicados en聽Science Translational Medicine.

"Este brazo no es una herramienta, es mi brazo". Esa sensaci贸n de pertenencia es otra de las grandes aportaciones de este trabajo. El extra帽amiento es la una de las causas de rechazo de las pr贸tesis convencionales

Otras pr贸tesis ya respond铆an a las 贸rdenes que recib铆an del cerebro. Pero su due帽o no pod铆a apartar la vista de la mano si no quer铆a destrozar lo que estuviera cogiendo, es decir, no eran capaces de reproducir el sentido del tacto. Y las que lo hac铆an, como la聽mano bi贸nica desarrollada por un equipo de investigadores suizos desvelada a comienzos de a帽o, se qued贸 en el laboratorio una vez que acabaron los experimentos.

"Magnus lleva la pr贸tesis consigo, la usa mientras juega con sus hijos, cuando se viste o cuando trabaja", recuerda Ortiz Catal谩n. Ya lleva 18 meses haciendo vida normal y cada d铆a aprende a usarla mejor. Sentado al lado del investigador mexicano durante la entrevista por Skype, asegura: "Este brazo no es una herramienta, es mi brazo". Esa sensaci贸n de pertenencia es otra de las grandes aportaciones de este trabajo. El extra帽amiento es la una de las causas de rechazo de las pr贸tesis convencionales.

El sistema de comunicaci贸n entre la pr贸tesis y el cerebro es bidireccional. Una acci贸n pensada se convierte en informaci贸n que llega hasta el extremo cercenado de los nervios y m煤sculos en forma de impulsos el茅ctricos. All铆, los electrodos la recogen y el sistema la descodifica y la transforma en una acci贸n de la pr贸tesis. En sentido inverso, un movimiento de los dedos o los brazos es convertido en se帽ales el茅ctricas que viajan brazo arriba hasta llegar al cerebro que las traduce en est铆mulos.

"Nos hemos concentrado en la sensaci贸n de contacto y presi贸n, que son de las m谩s importantes para la manipulaci贸n de objetos", explica Ortiz Catal谩n. A煤n quedar铆an otras propiedades del sentido del tacto, como la temperatura o la propiocepci贸n (sensaci贸n de s铆 misma).

Pero la trascendencia de su trabajo no es tanto la posibilidad de devolver a un amputado su capacidad de sentir lo que toca sino la manera de implementarlo cl铆nicamente por medio de la 贸seointegraci贸n para que el paciente pudiera llevar una vida normal. Como dice Ortiz Catal谩n: "esto crea una conexi贸n 铆ntima entre el cuerpo y la m谩quina, entre la biolog铆a y la mecatr贸nica".

Fuente: ELPAIS.COM / MIGUEL 脕NGEL CRIADO, ABC.ES