SE TRATA DE UN MATERIAL REVOLUCIONARIO

Mil millones de euros para investigar el grafeno

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La Comisión Europea destina el mismo dinero al "material revolucionario" y a un proyecto sobre el cerebro. Los cálculos a nivel neuronal se realizarán en el supercomputador Mare Nostrum.

20130128-3(BRUSELAS, 28/01/2013) La Comisión Europea ha proclamado este lunes los ganadores de un concurso europeo de Tecnologías Futuras y Emergentes (FET), dotado de varios miles de millones de euros. Las iniciativas ganadoras, Grafeno y Cerebro humano, recibirán cada una mil millones de euros para realizar durante diez años investigaciones de primer rango mundial en ámbitos donde se cruzan la ciencia y la tecnología. En cada iniciativa participan al menos 15 Estados miembros de la UE y casi 200 institutos de investigación.

 

El proyecto Grafeno investigará y explotará las propiedades únicas de un material revolucionario basado en el carbono. El grafeno es una extraordinaria combinación de propiedades físicas y químicas: es el material más fino, conduce la electricidad mucho mejor que el cobre, es entre cien y trescientas veces más fuerte que el acero y tiene propiedades ópticas únicas. En 2004, científicos europeos hicieron posible la utilización del grafeno y la sustancia está llamada a convertirse en el material prodigioso del siglo XXI (como lo fueron los plásticos en el siglo XX), sustituyendo en particular al silicio en los productos de TIC.

El grafeno [...] es el material más fino, conduce la electricidad mucho mejor que el cobre, es entre cien y trescientas veces más fuerte que el acero y tiene propiedades ópticas únicas.

El proyecto Cerebro Humano creará la instalación experimental más grande del mundo para elaborar el modelo más detallado del cerebro a fin de estudiar cómo funciona el cerebro humano y, en último término, desarrollar un tratamiento personalizado de las enfermedades neurológicas y afines. Esta investigación sienta las bases científicas y técnicas de un progreso médico que podría cambiar radicalmente la calidad de vida de millones de europeos, y cuenta con la participación del Centro Nacional de Supercomputación (BSC-CNS), en Barcelona, ya que los cálculos a nivel molecular se realizarán en el supercomputador Mare Nostrum y los investigadores del centro colaborarán en el desarrollo de modelos de programación.

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Fuente: EL PAÍS | Editado por Actualidad Evangélica