OPINIÓN / JOSEP-LLUIS CAROD-ROVIRA
Incultura religiosa
En este artÃculo, escrito originalmente en catalán y traducido por el pastor Daniel Banyuls, el exvicepresidente del Gobierno catalán critica el trato informativo y mediático hacia los cristianos protestantes por la más elemental "ignorancia e incultura religiosa"
Josep-Lluis Carod-Rovira
(JOSEP-LLUIS CAROD-ROVIRA, 02/02/2022) El nivel cultural de una sociedad y de los miembros que individualmente la componen, no depende del conocimiento que tienen de su propia identidad (nacional, cultural, lingüÃstica, polÃtica, religiosa) y de las relaciones que establecen con ella, sino, precisamente, de lo que saben de los otros y de las interacciones que con ellos puedan mantener.
Saber mucho de lo que consideras tuyo y, por tanto, “normalâ€, no te hace más sabio si, simultáneamente, lo desconoces prácticamente todo de lo que caracteriza a otros miembros de la misma sociedad para los cuales la noción de “normalidad†es totalmente distinta. Es una evidencia flagrante de incultura, entre otros calificativos y ninguno positivo, tratar a los demás a partir de unos esquemas mentales, un léxico y una visión de su mundo que no son suyos, sino nuestros, ya que somos nosotros los que hablamos desde nuestra singular situación.
«Adquiere dimensiones colosales la ignorancia, la incultura, el desconocimiento que exhiben, de manera habitual, tantos medios de comunicación y tantos profesionales.» |
Nadie se atreverÃa a presentar al papa Francisco como el gran rabino católico de Roma, al cardenal J.J. Omella como el gran muftà católico de Barcelona, al arzobispo de Valencia como patriarca, al obispo de Solsona como archimandrita, o referirse a la misa mayor de los domingos como el gran culto católico de alabanza y adoración. Si alguien asà lo hiciera aparecerÃa al instante como una persona indocumentada, carente de un nivel elemental de cultura que le incapacitarÃa, no sólo para ir por el mundo con el bagaje básico imprescindible, sino también para vivir en una sociedad civilmente madura que no ignora la diversidad de creencias, ideologÃas y opciones de pensamiento existentes en un paÃs como el nuestro.
Pues exactamente eso es lo que pasa con el mundo protestante en nuestro paÃs, cada dÃa que sale el sol. Adquiere dimensiones colosales la ignorancia, la incultura, el desconocimiento que exhiben, de manera habitual, tantos medios de comunicación y tantos profesionales de este gremio, en relación a la que ya es la segunda opción religiosa de Catalunya y la Comunitat Valenciana y la tercera en las Illes Balears, tanto por el número de creyentes como de centros de culto, sean templos o capillas de una dimensión más reducida.
Un diario asegura, sin ruborizarse, en un pie de foto con la imagen de un pastor presbiteriano: “Este es el cura protestante que dice la misa protestante los domingosâ€. Es difÃcil acumular más inexactitudes en tan pocas palabras. Porque con un poco de cultura general bastarÃa para no hacer el ridÃculo y no hay que ser un Einstein de la Reforma protestante para saber que al frente de las comunidades, congregaciones o iglesias protestantes hay pastores, los cuales, por cierto, no celebran misa, sino que presiden los cultos y predican sin que, por otro lado, sea necesario ser pastor para hacerlo. En honor a la verdad, hay que reconocer que en cuanto al dÃa de la semana han acertado, a cada uno lo suyo, aunque sea a los que meten la pata siempre. Con todo, los domingos los protestantes celebran cultos y no misas.
«És de dimensions colossals la ignorà ncia, la incultura, el desconeixement que exhibeixen, de manera regular, tants mitjans de comunicació i tants professional»
— NacióDigital (@naciodigital) February 2, 2022
«Incultura religiosa», de @CarodRoviraJLl #OpinióND https://t.co/L68Y02i4H0
Otro diario, de los de mayor tirada en el paÃs, informa que en cuatro de los nueve distritos barceloneses ya hay más “iglesias evangelistas†que católicas. Asà pues, por lo que parece, Mateo, Marcos, Lucas y Juan deben andar muy atareados y no pueden con su agenda. Estos son los cuatro evangelistas y, como mucho, se les podrÃa llamar asà a los que predican el Evangelio, término generalmente usado para referirse a los que no son pastores, pero no al conjunto de una comunidad ni mucho menos a un edificio fÃsico. Supongo que, en realidad, se refieren a iglesias protestantes o, en todo caso, evangélicas, pero no evangelistas. Produce cierta vergüenza leer noticias asÃ, sobre todo ante amigos alemanes, suizos, británicos, norteamericanos o escandinavos.
En un lugar donde, aunque parezca extraño, aún hay quien habla catalán, una radio pública informa sobre una matanza protagonizada en un templo bautista de Texas por un chiflado armado con fusiles y metralletas. Para ampliar la información, aclaran que ha habido muchas vÃctimas porque al ser domingo, como es lógico, todo el mundo estaba en misa. Francamente, si esto es cierto y todos estaban en misa, ¿cómo son posibles tantos muertos y heridos en un templo protestante donde no celebran misa y no, al contrario, en una iglesia católica donde sà la celebran? Totalmente incomprensible, por más que ya se sabe que en los Estados Unidos hacen cosas raras…
Josep-Lluis Carod-Rovira es autor de “Història del protestantisme als Països Catalansâ€
Miro una pelÃcula de suspense que se desarrolla en un paÃs escandinavo y una pareja que ha perdido un familiar comenta que, al dÃa siguiente, irá a la iglesia para hablar de la organización del funeral con el cura. Y dicho y hecho. Un dÃa después, les ves a ambos en un templo donde no hay imágenes, ni pila de agua bendita en la entrada, ni santos, ni vÃrgenes por las paredes, ni confesionarios. Y, mira por dónde, resulta que hablan con una mujer. ¿Será que el cura ha llegado tarde a la cita, la ha olvidado o los católicos ya admiten mujeres en el sacerdocio? Pues, no. Se trata de un templo protestante, donde no tienen curas sino pastores y, en este caso, pastora, pista ésta más que suficiente para comprender que la iglesia no es católica.
Pero nadie se disculpa nunca ante estos errores, propios de gente indocumentada, inculta e ignorante en materia de cultura religiosa, ni nadie rectifica de cara al futuro. Quizás, un dÃa, sin que nadie deba renunciar a sus ideas, creencias o convicciones, hablaremos con conocimiento de causa y con respeto de las ideas, creencias y convicciones de los otros. Al fin y al cabo, todos somos otros para los otros. También nosotros.
Autor: Josep-Lluis Carod-Rovira / Traducción al castellano: Daniel Banyuls
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***Josep-LluÃs Carod-Rovira es filólogo y autor de la “Història del protestantisme als Països Catalansâ€, profesor de historia del protestantismo en el máster sobre diversidad religiosa de la Universidad de Girona, comisario de la exposición “500 anys de Reforma protestantâ€, celebrada en Barcelona, y traductor al catalán de las 95 tesis de Lutero. Dirigió la Cà tedra sobre Diversitat Social de la Universitat Pompeu Fabra y fue Conseller en cap, Vicepresidente del Govern de Catalunya y diputado.