SILBO APACIBLE / por GUILLEM CORREA

Música y letra de la esperanza

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GUILLEMGUILLEM CORREA, 12/05/2015 |  Estos días en Barcelona se ha puesto música y letra a la Esperanza. O mejor dicho: El Festival de la Esperanza ha llenado Barcelona con su música y con su letra. Con su música, porque, los dos días que se llenó hasta la bandera, el Palau Sant Jordi, de la ciudad de Barcelona, vibró y se emocionó con las cálidas interpretaciones de los diversos artistas que pasaron por su escenario.

Con su letra, porque la música que se pudo escuchar iba avalada por la letra de la vida de todos los artistas, músicos, cantantes y otros participantes, que quisieron expresar su fe en Jesús. El Jesús que se presentó en el Palau Sant Jordi es el Jesús vivo que vive su vida en los miles y miles de seguidores y de seguidoras que se sintieron convocados y convocadas por este Festival.

Hoy, cuando en la vieja Europa hay quien pide que escondamos nuestra fe cristiana, miles y miles de personas se reunieron para celebrar, con la alegría de una gran fiesta musical, serena y respetuosamente, esta misma fe.

Desde el principio se dijo muy claramente: es un festival de música cristiana donde se hablará de Dios. Y se habló de Dios de muchas y de muy diferentes maneras. En una sociedad tan materialista como la nuestra llenar el Palau Sant Jordi de espiritualidad cristiana un día y repetirlo al día siguiente no es nada fácil y hay que ponerlo en valor.

Es un hito histórico. Es, también, un signo de Esperanza. Un signo de Esperanza que habrá que mantener vivo en el recuerdo. Pero también la evidencia contrastada de que en esta vieja Europa todavía hay gente, mucha gente, que cree en la Esperanza cristiana.

Autor: Guillem Correa Caballé

© 2015. Este artículo puede reproducirse siempre que se haga de forma gratuita y citando expresamente al autor y a ACTUALIDAD EVANGÉLICA. Las opiniones de los autores son estríctamente personales y no representan necesariamente la opinión o la línea editorial de Actualidad Evangélica.

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