RAZONES PARA CONTARLO

Más lejos o más cerca

( 2 Votos )
a / A
Larger Font Smaller Font

benitve-4(BENI MORENO, 18/03/2011) En muchas ocasiones he oído a personas expresan su frustración contra Dios ante situaciones que se les escapan de las manos.

Es lógico pensar que un Ser con tanto poder, que puede estar en todas partes a la vez, que lo sabe todo: el pasado y el futuro y que además puede actuar en cualquier momento sin la ayuda de estos pobres mortales, no haga algo en situaciones extremas de sufrimiento y dolor, como la que está viviendo el pueblo japonés. La noticia del terremoto en Japón y sus consecuencias nos pueden hacen pensar que estamos en manos de un azar loco, de una naturaleza caprichosa a la que no le importamos ni lo más mínimo. Es una forma de ver las cosas.

Pero a mí me llama la atención que hace dos años la cantante Soraya Arnelas, representante de España en el Festival de Eurovisión 2009, después de quedar en penúltimo lugar, se expresara ante los micrófonos y cámaras de los medios españoles con esta frase: “¡A mí no me para ni Dios!” No sé si lo recordarán, pero me pareció todo un desafío. Cuando la oí me acordé del Titanic y la famosa frase de uno de sus artífices y constructores: “Este barco no lo hunde ni Dios”. Todos conocemos el final de la historia.

Por el contrario, ha llamado también mi atención en estos días oír en una emisora de radio de alcance nacional,  el comentario que el locutor destacaba de un japonés a través de twitter y que decía: “Sólo nos queda rezar”. Me consta que hay muchos más japoneses confiando en que Dios puede hacer algo bueno en medio de la catástrofe.

Mi intención es resaltar el contraste de la actitud que podemos tomar en circunstancias extremas: expresamos nuestra frustración contra Dios o expresamos nuestra frustración ante Dios. Una actitud nos aleja de El y la otra nos acerca a El.

Tengo razones para contarlo…

Autor: Beni Moreno Cárdenas

Otros Articulos de Beni Moreno