MARIANO BL脕ZQUEZ, SECRETARIO EJECUTIVO DE FEREDE

Ante una eventual reforma de la Ley

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El art铆culo que reproducimos a continuaci贸n, fue publicado en el n潞 163 de聽la revista "Tempos Novos", en diciembre de 2010, con el t铆tulo "Ante una posible reforma de la Ley", originalmente en gallego. Lo reproducimos ahora, al recibir un ejemplar impreso de la misma, por considerar su contenido de actualidad y de inter茅s para nuestros lectores, ya que resume la posici贸n que Ferede defiende en materia de libertad religiosa.

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M. Bl谩zquez

(M. BL脕ZQUEZ / TEMPOS NOVOS, Dic. 2010) La Ley Org谩nica de Libertad Religiosa es una de las leyes b谩sicas de la democracia espa帽ola. En mi opini贸n, la democracia lleg贸 gracias a una doble transici贸n: la transici贸n pol铆tica y otra transici贸n menos conocida, desde la confesionalidad cat贸lica聽del Estado a un r茅gimen de te贸rica neutralidad. Digo te贸rica porque, ni en el 谩mbito jur铆dico, ni en el institucional, Espa帽a complet贸 esta transici贸n religiosa, que deber铆a traducirse en un tratamiento jur铆dico e institucional igualitario, pluralista y neutral.

Sin embargo, el camino a la libertad religiosa y el pluralismo se vio favorecido por dos bazas importantes: el art铆culo 16 de la Constituci贸n y, precisamente, la Ley Org谩nica de Libertad Religiosa (LOLR) que desarrolla el art铆culo referido. Aunque la LOLR no logr贸 eliminar las desigualdades del r茅gimen anterior, lo cierto es que puso fin a la etapa de mera tolerancia de la ley franquista de 1967 y le dio un canal jur铆dico a la libertad religiosa m谩s amplia jam谩s vivida en Espa帽a.

Las graves dolencias de la libertad religiosa no provienen de la LOLR; tienen su origen en una operaci贸n de transici贸n religiosa que no ha conclu铆do y que no hay indicios racionales de que pueda concluir a medio plazo. El problema radica en que no conseguimos un estatuto de libertad con los mismos derechos y las mismas obligaciones para聽 todos, que sea respetuoso con la identidad y peculiaridades de cada confesi贸n. Ese debe ser el objetivo de la libertad religiosa y mientras no lo consigamos ocurre que, algunas de las reformas que parecen l贸gicas, pierden su legitimidad al aumentar las desigualdades en la pr谩ctica.

En cierta ocasi贸n, se me consult贸 sobre una posible reforma que consist铆a en regular y ampliar los requisitos que debe exigir el registro para la anotaci贸n de los lugares de culto. La reforma pretend铆a聽 mejorar la transparencia y la seguridad jur铆dica para garantizar a los lugares de Culto la protecci贸n de las leyes. Sin embargo, mostr茅 mi oposici贸n, porque ese esfuerzo y el control que se les solicitaba a las confesiones religiosas s贸lo se les aplicar铆a a los lugares de culto de las religiones minoritarias (unos 3000), pero no a los m谩s de 22.000 lugares de culto que se estima tiene la Iglesia Cat贸lica y que, a pesar de no estar registrados tienen una protecci贸n igual o mayor que el resto de los lugares de culto.

No nos preocupa que no haya una ley nueva, sino:

- Qu茅 no se desarrolle la anterior en lo que respecta a las minor铆as.
- Que no se avance en la neutralidad del Estado.
- Que no haya un estatuto igual en derechos y obligaciones para todas las confesiones religiosas.
- Que no haya un desarrollo de la asistencia religiosa en los establecimientos p煤blicos (principalmente en hospitales y en el Ej茅rcito). Hay en las c谩rceles, pero no es igualitario en derechos ni en consideraci贸n jur铆dica.
- Que los lugares de culto de las minor铆as carezcan de protecci贸n y tutela jur铆dica efectiva contra los abusos del poder de los municipios.
-Que no se desarrollen los Acuerdos de Cooperaci贸n con el Estado firmados en 1992 con los protestantes.
- Que no haya una norma igualitaria en la aplicaci贸n de la asignaci贸n tributaria a favor de la Iglesia Cat贸lica o de las entidades sociales en el IRPF, y no exista esa posibilidad para los protestantes.

Estas cuestiones podr铆an liquidarse, no con una ley org谩nica sino con leyes ordinarias o disposiciones de inferior rango. La pregunta es si el Gobierno quiere hacer algo. De momento, lo que ha hecho es rebajar de rango a la Direcci贸n General de Asuntos Religiosos. La pol铆tica religiosa del gobierno antes estaba clara (avanzar hacia una mayor neutralidad o laicidad y desarrollar lo concerniente a las minor铆as), pero ahora nada est谩 claro y convendr铆a,聽 por parte del gobierno, una acci贸n decidida.

Publicado en el diario Tempos Novos N 潞 163 | Dic. 2010

(Traducci贸n: Actualidad Evang茅lica)

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