RESEÑA BIBLIOGRÁFICA / por ALFONSO PÉREZ RANCHAL

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"Cualquier método de investigación que de entrada elimina lo sobrenatural siempre producirá un ‘Jesús histórico' que, por definición, es radicalmente distinto del Cristo de los evangelios”

Foto de Zachary Olson en Unsplash

(Alfonso Pérez, 17/2/2024) Cuando se aborda el estudio de la persona de Jesús normalmente los textos que resultan son de dos tipos. Por un lado, aquellos que sencillamente consideran la vida de Jesús tal y como aparece en los evangelios; por el otro, aquellos que realizan una división entre el llamado Jesús histórico y el Cristo de la fe.

Los primeros suelen ser para la reflexión personal y para extraer enseñanzas que ayuden a la espiritualidad del creyente; los segundos suelen presentar la historia y aplicación del método histórico-crítico tomando además como clave la separación de lo que podría haber sido el Jesús real que caminó por Palestina en el siglo I y un Cristo de la fe, que sería un constructo sin ningún valor histórico resultado de la Iglesia primitiva.

Dicho esto, ante un libro como el presente, lo primero que puede preguntarse el potencial lector es a cuál de los dos tipos anteriores de textos pertenece. El título Jesús, Mesías: un estudio de la vida de Cristo, es cierto que ya no estaría dando una orientación de lo que nos vamos a encontrar, pero el libro de Robert H. Stein tiene algunas características destacables.

Si bien es cierto que el autor parte de la premisa de estar abierto a lo sobrenatural, también es alguien que conoce las principales objeciones que se le hacen a los relatos evangélicos. Este conocimiento lo va a plasmar allí en donde proceda y va a intentar dar la mejor explicación posible y, si se da el caso, de forma honesta reconocerá que todavía no tenemos los suficientes datos para tener una respuesta aceptable desde el punto de vista creyente.

Sin duda, los evangelios rezuman teología y son el resultado de la primera fe en Jesús de sus seguidores. Pero esto no es lo mismo ni significa que estén repletos de episodios fantasiosos. Los que sí creen esto último e identifican una cosa con la otra se mueven en una escasez de datos que realmente es llamativo, y en ocasiones me pregunto de qué y para qué hablan tanto de algo que ellos mismos admiten que se puede zanjar en unas cuantas líneas. Estas líneas son las destinadas a presentar a Jesús como un judío de su tiempo, muy cercano al fariseísmo, y que se vio a sí mismo como un profeta apocalíptico que anunciaba solamente a su pueblo la inminencia del fin del mundo y, por tanto, realizaba una llamaba al arrepentimiento. Ni hubo arrepentimiento ni llegó el fin del mundo y acabó crucificado, todo fue un sonado fracaso.

Stein por su parte -y que por supuesto no desconoce lo anterior- presenta al Jesús evangélico y va explicando cómo lo que tenemos registrado no son textos torpemente registrados o negligentemente contradictorios sino que, por el contrario, cuando se analizan desde precisamente una mirada de fe tal y como sus primeros seguidores tenían todo toma un cuerpo y un sustento que pasa desapercibido para aquellos que no proceden de esta manera.

Mirada de fe que no significa ignorancia del método histórico-crítico. Como muy bien dice el autor: "Cualquier método de investigación que de entrada elimina lo sobrenatural siempre producirá un ‘Jesús histórico' que, por definición, es radicalmente distinto del Cristo de los evangelios”. Y es que lo que algunos sostienen como erudición no es otra cosa que un escepticismo radical mal disimulado.

En las páginas 22 y 23 este profesor del Nuevo Testamento resume el contenido de su libro:

Jesús el Mesías comprende dos partes. La primera, "Cuestiones clave al estudiar la vida de Jesús", consta de tres capítulos y desarrolla cuestiones de carácter introductorio. El capítulo inicial expone las presuposiciones de la investigación. En este apartado explico mi acercamiento a lo sobrenatural y lo milagroso en la vida de Jesús. No se puede investigar la vida de Jesús sin tener ciertas presuposiciones. Con mucha frecuencia, el debate respecto a la historicidad de un milagro de Jesús registrado en el relato evangélico viene determinado, más por las presuposiciones respecto a los sobrenatural, que por los relatos del acontecimiento en sí. En el pasado, mucha de la investigación acerca de la "vida de Cristo" ha asumido desde el mismo comienzo la total imposibilidad de cualquier milagro. El lector tiene derecho a conocer de un modo franco y abierto la presencia de tales presuposiciones.

Después de exponer las presuposiciones o directrices de esta investigación de la vida de Jesús, examino las fuentes de que disponemos para tal indagación. El segundo capítulo analiza las fuentes judías, griegas y cristianas (tanto bíblicas como extrabíblicas) de que disponemos para estudiar la vida de Jesús, valorando cuáles de ellas serán más útiles a nuestro propósito. El capítulo tres expone lo que podemos saber respecto a los límites cronológicos de la vida de Jesús, investigando las pruebas disponibles para datar varios acontecimientos de la vida de Jesús.

La segunda parte de Jesús, el Mesías presenta "la vida de Jesús": la concepción virginal (capítulo 4), la juventud de Jesús (capítulo 5), el bautismo (capítulo 6), la tentación (capítulo 7), el llamamiento de los discípulos (capítulo 8), el mensaje de Jesús (capítulo 9), cristología (capítulo 10), la confesión de Pedro (capítulo 11), la transfiguración (capítulo 12), los acontecimientos del Domingo de Ramos (capítulo 13), la purificación del templo (capítulo 14) la última Cena (capítulo 15), Getsemaní, la traición y el arresto (capítulo 16), el juicio (capítulo 17), la crucifixión (capítulo 18) y la resurrección y ascensión de Jesús (capítulo 19).

Robert H. Stein nos presenta un libro bien documentado con una bibliografía que aparece al final de cada uno de los capítulos. Esta bibliografía también es diversa y presenta obras de autores de primera línea, como pueden ser Raymond E. Brown, John P. Meier, Joachim Jeremías o Craig A. Evans.

La vida de Jesús que nos muestra este autor es consistente y pone de manifiesto cómo los evangelios no pueden ser considerados sin más como el resultado de una serie de capas superpuestas de material y plagado de errores y contradicciones. Los evangelios tienen un propósito bien definido y que con unas correctas "gafas” se pone de manifiesto, y es entonces cuando su riqueza llega al lector. Por tanto, recomiendo la lectura reposada de este libro con una Biblia en la mano para ir considerando todas las citas bíblicas que se van aportando.

También es un excelente material para todos aquellos centros de estudios y facultades que tienen como asignatura la vida de Jesús.

Autor: Alfonso Pérez Ranchal

> Más información sobre este libro: “Jesús el Mesías: Un estudio de la vida de Cristo”, de R. Stein