MARÍA BERNABÉU

“No entiendo la vida sin Dios”

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Subcampeona del mundo de Judo. Antes de nada: sí, es seguidora del Madrid. Pero ahí no queda la cosa en esa opción, seria, de medalla en los Juegos. Nació en Salamanca, vive en Alicante y compite con licencia gallega. Y es todo perfectamente normal. Un torrente de fuerza que busca inspiración en dos lugares: en Japón y en la iglesia (evangélica) los domingos.

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María Bernabéu, subcampeona del mundo de Judo

(EL MUNDO / ALICANTE, 01/02/2016)  María Bernabéu nación en Salamanca en 1988 y quiso dedicarse al patinaje artístico. Sin embargo, a su madre no le pareció buena idea y eligió para ella el Judo, un deporte “de chicos”, pensaba María, que hoy se pasa la mitad de su vida en el gimnasio Ozone de San Juan de Alicante, donde entrena a las órdenes de Carlos Montero.

Se ríe con mucha facilidad y luego se pone a entrenar con un frenesí que asusta. Va a Río por la medalla. Si es como la de plata del último Mundial (agosto de 2015 en Kazajistán, categoría -70 kg) sería estupendo para una “currante”. Así se describe.

Pregunta.- ¿Con qué más se define?

P.- Es usted muy religiosa.

R.- No entendería la vida sin Dios. Desde muy pequeña mi madre nos ha inculcado la fe cristiana, y de hecho voy a misa (léase, "culto evangélico") todos los domingos.

P.- Será de las más jóvenes.

R.- Bueno yo soy cristiana por la rama protestante, y sí que hay bastante gente joven.

Respuesta.- Soy luchadora, trabajadora, y cuando confío en lo que hago voy a por ello. Soy cabezota cuando tengo las cosas claras.

P.- Su lema es: trabajo, trabajo y trabajo.

R.- Es la palabra que me define. No soy superdotada en el deporte. He tenido que, a base de golpes, llegar donde estoy, que es la élite.

P.- ¿De qué golpe le costó más levantarse en estos años?

R.- La temporada 14/15 fue dura, aunque terminó con el subcampeonato del mundo. Me olvidé de quién era y tuve que volver a la esencia. Una de las cosas que hice fue volver a Japón, un lugar mágico.

P.- ¿Ah sí?

R.- Sí, es la cuna de mi deporte y ahí pude inspirarme y volver a mi esencia, que es el trabajo.

P.- ¿Qué tiene Japón que no tenga Alicante, por ejemplo?

R.- ¡Qué tiene Japón que no tenga España! Una forma de ver la vida diferente. No te enseñan a trabajar, ellos nacen sabiendo trabajar.  Saber que tienes que cumplir, no porque el entrenador te esté mirando, sino porque tengo que hacerlo y punto.

P.- ¿Le hacen bromas futbolísticas con su apellido?

R.- Bastantes. La típica es: serás del Madrid, ¿no?

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P.- Será del Madrid, ¿no?

R.- Sí, sí. Me gusta el fútbol y soy del Real Madrid.

P.- ¿Por qué eligió el Judo?

R.- Eso pregúntaselo a mi madre. Yo quería hacer patinaje artístico. Pero como yo era grandota y fuerte, a mi madre se le ocurrió que Judo estaba bien para mí.

P.- ¿Y cómo lo aceptó?

R.- Lloré mucho los primeros meses. Le decía a mi madre que me estaba haciendo la vida imposible, que yo quería patinar…

P.- ¿Y ahora?

R.- Ahora le digo: gracias mamá.

P.- ¿Cuándo empieza a gustarle?

R.- Cuando cambio el concepto, dejo de pensar que es un deporte de chicos. Cuando veo que me lo estoy pasando bien con los juegos, porque al principio aprendes jugando, y sobre todo cuando veo que empiezo a ganar.

P.- Es que ganar está muy bien.

R.- Claro, es que ganar mola mucho. De hecho, mi mejor medalla no es ninguna de las de Europa o del mundo. Es la plata de mi primer campeonato de España infantil.

P.- ¿Esto es más talento, fuerza, técnica, algo mental…?

R.- Es una combinación de todo. De esas cualidades yo tengo alguna. Soy muy fuerte físicamente, pero habilidosa no soy, y muy técnica la verdad es que tampoco.

P.- Nace en Salamanca, vive en Alicante y compite por la Federación gallega. ¿Lo puede explicar?

R.- En el Judo se puede hacer eso. El trato en la Federación gallega es más cercano, no sé, no responde a ninguna razón concreta.

P.- Y cuándo va a Japón, ¿cómo se lo paga? Porque barato no es…

R.- Los primeros años de mi bolsillo, y estos últimos de la Federación.

P.- ¿Tiene beca ADO?

R.- Este año sí, pero porque conseguí medalla el año pasado. El ADO siempre viene a posteriori, te ayuda cuando ya has llegado. Pero, ¿quién te ayuda mientras llegas?

P.- ¿Quién?

R.- Pues en mi caso mis padres.

P.- Es usted muy religiosa.

R.- No entendería la vida sin Dios. Desde muy pequeña mi madre nos ha inculcado la fe cristiana, y de hecho voy a misa (léase, "culto evangélico") todos los domingos.

P.- Será de las más jóvenes.

R.- Bueno yo soy cristiana por la rama protestante, y sí que hay bastante gente joven.

P.- Y está terminando derecho.

R.- Me falta el trabajo de grado, pero sí, ya lo he terminado.

P.- En los pleitos, ¿usará el Judo?

R.- ¡No, no!

P.- Serán sus primeros Juegos Olímpicos.

R.- Es algo con lo que he soñado siempre, quiero disfrutarlo al máximo y, si cae una medalla, genial.

P.- Explique, para poco iniciados, las reglas del Judo de manera que las podamos entender.

R.- Cuando tiras al rival y caes como de culo, o medio de lado, es un Yuko, y es un punto. Después, si cae casi totalmente con la espalda en el suelo, es un Ippon y termina el combate, que también puede terminar con dos Waza Ari.

P.- Usted, ¿ataca o defiende?

R.- Yo soy una agonías, voy a que la otra se desespere, y cuando está desesperada, ahí voy yo a atacar.

Fuente: EL MUNDO / Eduardo J. Castelao


ENTREVISTA (AUDIO) EN "LA HORA D" / RADIO ENCUENTRO

Nuestros compañeros de "La Hora D" (Radio Encuentro / Radio Cadena de Vida) entrevistaron en exclusiva a María Bernabéu...