OPINI脫N / M脕XIMO GARC脥A RUIZ

El rol de los ancianos

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(M谩ximo Garc铆a Ruiz, 02/04/2020) El Senado, del lat铆n senatus (consejo de los ancianos) refleja la ancestral tradici贸n que los romanos recibieron de otras culturas anteriores y que ellos elevaron a una prestigiosa y prestigiada instituci贸n en la que se apoy贸 la grandeza del imperio romano. 

En la misma Roma, la autoridad del pater familias se convirti贸 en la pieza clave de la familia extensiva; hijos, casados o solteros, nueras, yernos, nietos, sirvientes o esclavos, todos estaban sometidos a la autoridad del pater familias, generalmente personas de provecta y proba edad. 

Cuando los pueblos carec铆an de los sofisticados medios de comunicaci贸n y entretenimiento actuales, eran los abuelos los que transmit铆an a las nuevas generaciones los arcanos de la sabidur铆a familiar y colectiva; a falta de televisi贸n, videojuegos y cualquier otro medio de distracci贸n actuales, los abuelos eran los encargados de contar cuentos a los nietos para distraerles.

En la 茅poca contempor谩nea, a los abuelos, mientras no son demasiado viejos, les ha sido asignado un nuevo rol: el de canguros, encargados del cuidado de los nietos, cubriendo las prolongas ausencias de los padres y sustituyendo en buena medida su tarea como pedagogos.

La sociedad actual est谩 sufriendo cambios que inciden directamente en los ancianos. La situaci贸n demogr谩fica afecta al envejecimiento progresivo de la poblaci贸n y a un descenso espectacular de la tasa de natalidad. Y, en la medida en la que aumenta el envejecimiento de la poblaci贸n, crece la tasa de dependencia. La mujer, que anteriormente se dedicaba a criar a sus hijos y al cuidado de sus ancianos y enfermos, ahora se ha incorporado masivamente al trabajo. Por otra parte, las viviendas de la clase media trabajadora son cada vez m谩s reducidas y costosas y no ofrecen espacio a quienes no forman parte del n煤cleo familiar reducido.

El surgimiento de la urbe, sobre todo las grandes urbes y los cambios sociales que se han producido, han modificado el status de las personas mayores, que han sido desplazadas progresivamente no s贸lo del ciclo productivo sino tambi茅n del c铆rculo familiar, convirti茅ndoles en abuelos, jubilados, viejos, ancianos, cuando no en vejetes, vejestorios, f贸siles, carcamales, englobados en una denominaci贸n ambigua: clases pasivas o tercera edad; incluso ha sido necesario inventar  un nuevo grupo, cuarta edad, para agrupar a los que entran en la etapa nonagenaria. Un colectivo (鈥渘uestros mayores鈥; 驴mayores de qui茅n?) que se ha convertido en una carga familiar y social con la que no se sabe a veces qu茅 se puede o debe hacer. Estos cambios hacen que el anciano tenga dif铆cil anclaje en la familia actual.

El antiguo pater familias, revestido de autoridad, miembro relevante de la sociedad como integrante del Senado, es decir, el Consejo de los ancianos,  transmisor de la cultura familiar y colectiva, ha mutado en ese vejete cabizbajo que arrastra su maleta cada dos o tres meses para ir emigrando de una a otra casa de los hijos quienes, por su parte, cuentan los d铆as que a煤n quedan para llevar a cabo el nuevo traslado; o bien, sustituyendo y colectivizando el recurso anterior, son aparcados en una de esas 鈥渞esidencias para mayores鈥, desgajados de su entorno vital, sin otra misi贸n que esperar la muerte que, a veces, llega inesperadamente de forma masiva, como ha ocurrido con motivo de la pandemia provocada por el corona virus covid-19. Que est谩 dejando las residencias devastadas.

Es cierto que conocimiento y sabidur铆a no siempre van unidos, pero son los dos atributos que la Biblia adjudica a los ancianos y es por ello por lo que, en la antig眉edad, sol铆an ser los ancianos quienes ten铆an asignada la tarea de ejercer el liderazgo social como una extensi贸n del que ya ejerc铆an con respecto a la familia. En el Nuevo Testamento se recupera esta idea para trasladarla a denominar el oficio de aquellos que son puestos al frente de las primeras iglesias, buscando en los 鈥渁ncianos鈥, al margen de la edad, su capacidad, es decir, su conocimiento y sabidur铆a. Y cuando los ancianos, con el paso de los a帽os u otras circunstancias adversas, pierden esa capacidad y el rol que ven铆an desempe帽ando ha de ser transferido a otros, para ellos las Escrituras solicitan algo tan sencillo como respeto. 鈥淒elante de las canas te levantar谩s, y honrar谩s el rostro del anciano鈥 (Lev铆tico 19: 32a). Y ya en el plano familiar, el mandamiento es: 鈥淗onra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra鈥 (Efesios 6:2,3).

Abrazos en tiempos de pandemia

Est谩bamos ya profusamente saturados,
un abrazo, un fuerte abrazo, muchos abrazos,
como si de una letan铆a se tratara,
abrazos fugaces, breves, ef铆meros, falaces,
y en muchas ocasiones, simplemente virtuales,
sin calor, sin que el abrazo
nos hiciera sentir otra emoci贸n
que no fuera embarazo.

Abrazos por encargo,
dale un abrazo a tu padre, a tu mujer
y tambi茅n a tu hermano.
Abrazos que acompa帽an el cierre de una carta
驴qu茅 digo una carta? Un e-mail pasajero.
P谩jaros que no anidan, sin apenas resuello,
que se quedan flotando
colgados del alero.

Y de pronto, lleg贸 la pandemia.
Nos rob贸 los besos,
 y tambi茅n los abrazos;
y ahora, hu茅rfanos y aislados,
a帽oramos.
aquellos abrazos que parec铆an fugaces,
abrazos veraces,
los queremos sinceros, eficaces.

漏 M谩ximo Garc铆a Ruiz, marzo de 2020

Autor: M谩ximo Garc铆a Ruiz. Abril 2020 / Edici贸n: Actualidad Evang茅lica

漏 2020- Nota de Redacci贸n: Las opiniones de los autores son estr铆ctamente personales y no representan necesariamente la opini贸n o la l铆nea editorial de Actualidad Evang茅lica.

20120929-1*M脕XIMO GARC脥A RUIZ nacido en Madrid, es licenciado en Teolog铆a por la Universidad B铆blica Latinoamericana, licenciado en Sociolog铆a por la Universidad Pontificia de Salamanca y doctor en Teolog铆a por esa misma universidad. Profesor de Historia de las Religiones, Sociolog铆a e Historia de los Bautistas en la Facultad de Teolog铆a de la Uni贸n Evang茅lica Bautista de Espa帽a-UEBE (actualmente profesor em茅rito), en Alcobendas, Madrid y profesor invitado en otras instituciones. Pertenece a la Asociaci贸n de Te贸logos Juan XXIII. Ha publicado numerosos art铆culos y estudios de investigaci贸n en diferentes revistas, diccionarios y anales universitarios y es autor de 21 libros y de otros 12 en colaboraci贸n, algunos de ellos en calidad de editor.

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