INTERNACIONAL / EEUU
Inundaciones devastan un campamento cristiano evangélico en Texas: al menos 27 niñas y monitores fallecidos
El río Guadalupe creció hasta 8 metros en apenas 45 minutos durante la madrugada, sorprendiendo a más de 750 campistas que dormían en literas.

Grupo de niñas en Camp Mystic, donde ocurrió la tragedia / Foto: web Camp Mystic
(Hunt, Texas, 10/07/2025) Un torrente súbito del río Guadalupe arrasó el pasado 4 de julio el campamento Camp Mystic, un recinto cristiano para niñas de entre 8 y 17 años, ubicado junto al río en el condado de Kerr, Texas. Se confirma al menos 27 víctimas mortales entre niñas y monitores; cinco menores y una consejera aún permanecen desaparecidas.
El Guadalupe creció hasta 8 metros en apenas 45 minutos durante la madrugada, sorprendiendo a más de 750 campistas que dormían en literas. Las cabañas de la ribera, como "Bubble Inn", fueron barridas por la corriente; sobrevivientes relatan escenas de caos y rescates arriesgados.
El director del campamento, Richard “Dick” Eastland, que había administrado Camp Mystic desde 1974, falleció intentando evacuar a menores.
El desbordamiento del río provocó olas de lodo, árboles arrancados y estructuras destrozadas en kilómetros a la redonda. Más de 850 personas fueron rescatadas en las primeras 36 horas, incluidas varias niñas que nadaron hasta terreno seguro.
Las autoridades del condado de Kerr elevan el balance regional de fallecidos a más de 110 y alrededor de 160 desaparecidos, con la mayoría de los incidentes concentrados en los alrededores de Kerrville.
En un comunicado, los responsables de Camp Mystic expresaron: “Nuestros corazones están rotos... estamos orando por las familias” y solicitaron respeto y privacidad.
Los equipos de emergencia, incluidos la Guardia Nacional y nadadores de rescate de la Guardia Costera, recibieron elogios por salvar a decenas de niñas. El rescatista Scott Ruskan, en su primera misión, y consejeros adolescentes fueron clave en la evacuación de al menos 165 personas.
Las críticas apuntan a la ausencia de un sistema eficaz de alertas en zonas vulnerables, y se reavivan debates sobre recortes en el Servicio Meteorológico Nacional y la falta de sistemas de aviso tempranos. El gobernador Greg Abbott declaró emergencia y prometió reforzar la respuesta ante lluvias repentinas.
Comunidades locales y organizaciones evangélicas, como Operación Bendición, han movilizado ayuda humanitaria: ofrecen comidas, duchas y atención emocional.
Mientras los rescatistas continúan la búsqueda, la devastación en Camp Mystic expone nuevamente la vulnerabilidad de campamentos cerca de ríos y la urgente necesidad de mejorar sistemas de prevención y comunicación frente a eventos meteorológicos extremos.
Fuente: Prensa Texas / Redacción: Actualidad Evangélica












